La formación académica o las competencias técnicas han dejado de ser los únicos filtros importantes al momento de insertarse en el mercado laboral. Hoy las habilidades blandas o soft skills han ganado terreno y los equipos de contratación las consideran como pilares fundamentales, sobre todo cuando se trata de puestos directivos. Algunas de estas habilidades son la resolución de problemas, capacidad de organización, adaptabilidad, sociabilidad, pensamiento crítico y liderazgo.
Cuando escuchamos la palabra “líder” es común asociarla con altos cargos dentro de una empresa. Este significado es adecuado, ya que los líderes suelen hacerse responsables de uno o más grupos de personas. No obstante, existe una amplia gama de cualidades que se requieren para ejercer un buen liderazgo. Es así que podemos distinguir entre buenos y malos líderes. Entonces, ¿en qué medida se puede llegar a ser uno u otro?
Si te interesa saber cuáles son las habilidades que necesitas para ejercer un buen liderazgo, desde UIE te invitamos a continuar leyendo este artículo.
¿Qué es ser un buen líder?
En tiempos donde todo está en constante cambio, las dinámicas de trabajo no son la excepción. Ser líder es mucho más que tener facultades para la toma de decisiones o dar las órdenes en un equipo.Es decir, se requiere de personas que sean capaces de cohesionar a todos los miembros de una organización, dándoles un sentido de pertenencia y buscando el crecimiento conjunto.
Aunque parezca una tarea sencilla, ser un buen líder es el resultado de un aprendizaje continuo, donde la empatía y la autocrítica serán tus mejores aliados. Asimismo, se requiere un cambio de mentalidad en donde exista una valoración tangible del capital humano. Es así que podemos entender mejor la diferencia entre ser jefe y ser líder. Mientras que el primero ejerce poder desde una posición de superioridad jerárquica, el segundo se aproxima a su equipo de forma más horizontal para fomentar un compromiso real.
La importancia del liderazgo en la gestión de equipos se vuelve evidente para la consecución de objetivos. Algunas de las características o habilidades que se necesitan para desarrollar un buen liderazgo son:
Comunicación efectiva
Es imprescindible que un líder tenga claro los objetivos y sea capaz de transmitirlos al resto de su equipo. Una comunicación defectuosa puede devenir en un retraso de las tareas propuestas o peor aún, en su incumplimiento. En ese sentido, cuesta menos agendar una reunión para explicar los procedimientos a seguir y aclarar cualquier duda, en lugar de esperar que los miembros del grupo den por sentado lo que deben hacer.
Inspirar confianza
Fomentar temor en los colaboradores de una empresa quedó en el pasado. Es mucho más provechoso inspirar confianza, pues de ella se pueden obtener grandes resultados e incluso ideas novedosas. Estar pendiente del bienestar de las personas con las que trabajas no solo los hará sentir más motivados, sino que generará una mayor implicación del equipo con sus objetivos.
Empoderamiento del equipo
Un buen líder sabe delegar las tareas de manera oportuna. Si bien los líderes deben ser capaces de brindar las herramientas necesarias, también es fundamental que permitan el desarrollo de la autonomía. Estar excesivamente al pendiente de cada paso que realiza un colaborador puede traer como consecuencia que este dude de sí mismo y de lo que está haciendo.
Escucha activa
Para que un proyecto salga adelante es necesario que todos los miembros del equipo lo sientan como suyo. Sin embargo esto es imposible si quienes integran un grupo de trabajo no tienen la posibilidad o el espacio para expresar sus preocupaciones e ideas. De este modo, mientras más escuchado se sienta un colaborador en una empresa, mayor será su compromiso con esta y con las tareas que está realizando.
Consejos para liderar un equipo
A continuación, te indicamos algunos consejos que debes tomar en cuenta al momento de presidir un equipo de trabajo:
- Presta atención a los miembros de tu equipo e intenta resolver todas sus dudas.
- Sé empático y toma siempre en cuenta los sentimientos de las personas antes de expresarte.
- Actúa con optimismo y compártelo con los demás. De esta manera crearás una atmósfera de trabajo agradable de la que todos querrán ser parte.
- Celebra las victorias a nombre de todo el grupo y no a título personal. Recuerda que nada sería posible sin la cooperación de cada integrante de tu equipo.
Si te interesa formarte como líder, en UIE hemos diseñado un modelo universitario que apuesta por el desarrollo del liderazgo y fomenta el trabajo en equipo. Durante tu formación, compartirás aulas con estudiantes de distintas especialidades y esto te permitirá obtener una retroalimentación de enfoques diversos. Además, aprenderás de profesionales activos en sus sectores para que explotes tu potencial basándote en las necesidades del mercado actual.
